1RA EDICIÓN – PROGRAMA MULTIMEDIA “MIRANDO DESDE EL BALCOM” 2024
Becaria encargada de los equipos y organización del laboratorio de Comunicación Social
Autores: Valeria Rivera, Seryei Farfán y Ibeth Martínez
Jenny Márquez Rojas es una estudiante de quinto semestre de Comunicación Social en la Universidad Católica Boliviana “San Pablo”, la misma ejerce su rol de becaria desde el mes de marzo de 2022 como encargada del laboratorio audiovisual (LAV). Entre las funciones que desempeña son realizar el inventario de los equipos, organiza los horarios, y divide su tiempo para sus actividades religiosas y de apoyo humanitario en la Iglesia San Roque, es lo que le posibilitó obtener su beca de pastoral, ya que es una de las pocas y pioneras ministras de la palabra desde el año 2016.
Al ingresar al laboratorio de comunicación el primer rostro conocido y dulce que puedes encontrar es el de Jenny, ella es una joven con 21 años de edad, la cual posee una contextura que denota fuerza, de estatura prominente que ronda aproximadamente el metro con 70 centímetros, es de tez morena y posee ligeras ondas color castaño oscuro en su frondosa cabellera, utiliza unos lentes de marcos gruesos y grisáceos; como era de esperar rápidamente te puedes dar cuenta que eres bienvenido dado que con una cálida sonrisa, ella puede hacerte sentir como en casa.
De inmediato llegas a percibir lo cómodo y ameno que es el ambiente, música sonando, chicos riendo y conversando, así mismo es fácil darse cuenta lo organizada que es la protagonista de esta historia, debido a que todo lo tiene bien anotado en su agenda y no se pierde ningún detalle, lo cual va en total relación con su papel de ministra de la palabra y encargada de disciplina en la parroquia, al ver su ambiente de trabajo claramente se observa una persona muy dedicada y ocupada; además que su dogma religioso se percibe fácilmente ya que al cruzar unas palabras con Jenny siempre escucharas la frase “gracias a Dios”.
En la vida de Márquez Dios posee un papel indispensable, ya que le ayudó a superar muchas etapas duras de su vida, uno de los peores momentos que enfrento Jenny fue la pandemia ya que su rutina se vio estropeada y la frustración del encierro, repercutieron drásticamente en su salud, de a poco ella veía como se le caía el cabello, su estrés y ansiedad dominaban gran parte de su sentir, pero como en cualquier momento de crisis siempre hay una luz al final del camino y con la ayuda divina pudo seguir adelante, es así que ella dedica su vida a ayudar a los demás, ya sea con obras de caridad o con papeleo en laboratorio.